Re coquinaria es uno de los primeros libros que se conoce de cocina y que nos permite acercar la cocina de los romanos a la actualidad. Fue escrito por Marco Gavio Apicio, considerado como el primer gastrónomo de la historia. Nació en el siglo I de nuestra era, por lo que vivió entre los reinados de Augusto y Tiberio, en el inicio del Imperio Romano. Provenía de una familia acomodada y además contaba con una herencia por aquel entonces millonaria. Decidió emplearla rodeándose de cocineros, agricultores, bodegueros y demás personas capaces de ofrecer los productos más caros y refinados de aquella época.
Su legado fue el famoso y reconocido Re coquinaria, que significa algo así como La cocina. Realmente este no es el primer libro de cocina que se conoce, ya que existen manuscritos del siglo V que hablan sobre la cocina griega.
Existen multitud de adaptaciones que se han hecho de este libro. De esta forma, podemos conocer un poco más el mundo de la antigua Roma a través de su gastronomía.
Tabla de contenidos
¿Cómo era la cocina de los romanos?
En Nutt, hemos querido echarle un vistazo, y poder enseñarte las cosas que más nos han llamado la atención
Tienes que saber que muchos de los ingredientes que utilizamos hoy en día no los encontrarás en este libro. Productos como el tomate, el pimiento, la patata o el té no eran conocidos en aquella época. No fue hasta el descubrimiento de América cuando empezaron a incorporarse en la dieta europea.
En el libro no solo encontramos recetas, sino que también podemos encontrar técnicas de conservación de los distintos alimentos. Los fritos u otras recetas para arreglar el garum o preparar vino para los viajes, son algunos de los múltiples consejos que nos ofrece este peculiar autor.
Los productos más exclusivos y extravagantes
Uno de los ingredientes más utilizados en la cocina romana, es el garum y aparece en la mayoría de recetas. Este ingrediente es un tipo de líquido o de jugo que se extraía a partir de la maceración de tripas de pescado, habitualmente de caballa. Estas tripas se ponían en un recipiente de barro, se cubrían con sal y hierbas aromáticas y se extraía el garum.
El garum como muchos investigadores aseguran ya era consumido por los fenicios, y los romanos la integraron, posteriorente, en su gastronomía. La receta varió un poco, ya que los fenicios utilizaban las tripas de los atunes y de los delfines.
A pesar de que actualmente, en nuestra cocina, no se utilizan muchas especias, esto no fue así siempre. Los romanos utilizaban una gran cantidad de especias y hierbas aromáticas. Algunas que actualmente están desaparecidas y otras las podemos encontrar en la gastronomía típica de países como Ecuador, por ejemplo el coliandro.
Puede llamar la atención que existen multitud de recetas en las que aparecen ingredientes como la malva (una planta silvestre) la trufa u otros tan excéntricos como el flamenco o el avestruz.
La cocina de los romanos en la actualidad
Replicar la mayoría de recetas que encontramos en el Re coquinaria hoy en día podría convertirse en una tarea muy complicada. La mayoría de ingredientes que aparecen en el libro son muy difíciles de encontrar y existen otros que podrían ser, además, perjudiciales para la salud.
Desde Nutt, te traemos una receta que hemos adaptado, para acercar la cocina de los romanos a tu día a día.
Calabaza a la alejandrina
Ingredientes
- ½ Calabaza
- Pimienta en grano
- Comino en grano
- Granos de cilantro
- Menta
- Vinagre
- Miel
- Dátiles
- Frutos secos
- Aceite de oliva
- Sal
Elaboración
En primer lugar, pelaremos la calabaza y la cortaremos en trozos medianos. Mientras precalentaremos el horno a 180ºC
Sobre una bandeja, extenderemos papel vegetal y pondremos la calabaza sobre este.
A continuación, en un mortero machacaremos la pimienta, el comino, la menta y los granos de cilantro y mezclaremos con un poco de vinagre y miel.
Cubrimos con esta mezcla la calabaza y añadimos un poco de aceite de oliva. Lo cocinamos en el horno durante 25 minutos.
Por otro lado, picamos los dátiles y los frutos secos y se lo añadimos a la calabaza a los 20 minutos de estar en el horno.
Por último, cuando ya esté cocida, la sacamos del horno y la servimos con un poco de pimienta molida.
Sonia Valero
Graduada en Gastronomía
Nutricionista en Valencia